En el espejo del mundo es donde vemos reflejado el resultado de nuestros pensamientos, tanto lo que nos agrada como lo que no. Si no te gusta lo que ves, es porque estás más enfocado en aquellos aspectos que no deseas.
Tu solías afirmar el hecho: “No me gusta mi mundo” y el espejo, por supuesto, te confirma ese hecho y te muestra aquello a lo que te resistes.
Ten presente que tus pensamientos son la clave de cómo se está formando tu realidad, todo lo que ves en el mundo físico tiene su origen en el mundo interior invisible de tus creencias. Para llegar a ser dueño de tu destino, tienes que aprender a controlar la naturaleza de tus pensamientos habituales dominantes.